El 4, el 7, el 10, hoy… Cumpleaños!!!

En muchos lugares del mundo, Septiembre es el mes de la amistad, también del Carángano, para el Sol es el mes de su paso por Virgo, es el mes de las abejas y para el otro hemisferio es el comienzo de la primavera, para los niños es el comienzo de un nuevo curso, para los manchegos es el mes de la vendimia pero para mí es algo muy diferente: es el mes de los cumpleaños!! Con el tiempo se han ido acumulando cumpleaños tras cumpleaños en este mes de forma que del ritmo entre tarta y tarta suelo coger unos empachos bien dulces!! Para que os hagáis una idea tengo 4 cumpleaños de familiares, de una chica bien deli y otros 4 de amigos más… se ve que en las navidades hace mucho frío… Por muchos esfuerzos que haga para evitar tanta golosina… ¿Cómo resistirse?

Y es que esto de los cumpleaños está plagado de tradiciones. Hay que decir que lo normal entre las culturas europeas prerromanas era la celebración no de la vida, si no de la muerte. Se conmemoraban los aniversarios de la muerte de un hombre importante y de forma muy diferente a la actual. Los primeros en festejar lo nacimientos fueron los egipcios, los cuales siendo capaces de calcular fechas con precisión festejaban lo nacimientos de sus Faraones como de sus hijos varones, solo las clases altas disponían de este honor y la única fémina que disfrutaba de esta fiesta era la propia Faraona. Una de las primeras fiestas de cumpleaños de las que se tiene constancia es la que Cleopatra organizó para Marco Antonio, hasta los invitados recibieron regalos fastuosos.

Esa costumbre traspasó fronteras y así llegó a Babilonia y contagió a griegos y persas, quienes añadieron más detalles. Los Griegos nos legaron el concepto de cumpleaños que los Romanos se dedicaron a difundir por sus provincias. Los Persas, artesanos y verdaderos sibaritas añadieron la moda de confeccionar un pastel para regalar al cumpleañero. Al ser unos increíbles reposteros la dulce idea fue todo un éxito. Para más INRI ellos también son los culpables de otra de las prácticas habituales de ese día. En el sexto día de cada mes preparaban una torta de harina y miel para su diosa Artemisa, proveedora de caza, quien estaba muy relacionada con la Luna, por lo que para evocarla se encendía sobre la Torta una llama que representaba la luz sobre los hombres.

Celebrar 12 veces al año los cumpleaños de las deidades es bastante agotador y más aún para los griegos que tenían tantas, así decidieron que ese honor solo era digno de hombres importantes, y solo una vez al año, eso sí, para la ocasión preparaban un gran banquete con que agasajar a sus invitados. De todas formas se tenía la costumbre de festejar la muerte y de ella provienen las actuales celebraciones en atención a grandes hombres fallecidos, como ocurría en la Roma anterior a los cristianos donde la fecha del asesinato de Cesar era motivo de grandes actuaciones en el Circo y desfiles por las calles.

Estos Pseudos-Cumpleaños tuvieron todo su apogeo con la llegada del cristianismo, que considera que los niños vienen al mundo con “el pecado original” y no hay motivo para celebrar su llegada, si no más bien su “salida” hacia el reino eterno y de ahí que los cumpleaños desaparecieran por siglo y tradición pasara a ser en conmemoración de la fecha de su muerte. Un recuerdo de esos siglos de oscuridad es que el calendario cristiano no marca el santoral según el nacimiento de los santos, si no como la fecha de su muerte… Era tanto el odio cristiano por esas tradiciones “paganas” que hasta se censuraba celebrar el nacimiento de Jesús y hasta el siglo VI las mentes cerradas de la iglesia impidieron hasta el cálculo de la fecha aproximada (de ahí el penoso calendario gregoriano al compararlo con el egipcio). A partir de entonces un pequeño renacimiento de las letras (incluido el impulso dado por el gran Carlomagno) procuró nueva vida a esta celebración.

Así se llegó a extender de nuevo la familiaridad del nacimiento y en el Siglo XII ya las iglesias registraban también los nacimientos. En especial tomo fuerza en la Alemania de la Edad media donde se recuperó la costumbre del pastel que se transformó en tarta y el recuerdo de la Diosa Artemisa en velitas (en un número igual a la edad del festejado) representando la luz de la vida que se debían apagar de su soplo para atraer buena suerte el resto del año. En aquel entonces se mimaba más aun a los niños, que eran festejados desde el amanecer y que recibían, en caso de haber sido buenos, regalos del “Señor del Cumpleaños”, una especie de Papa Noel de los cumples. Ese día el niño era el Rey.

Pero no todo es felicidad para el cumpleañero!! En España y Argentina existe la costumbre de tirar de las orejas tantas veces como los años cumplidos para recordarle los sufrimientos pasados y celebrar la felicidad. Los judíos suelen sentar al niño en una silla y marearle un poco subiéndola y bajándola tantas veces como años cumpla el sufrido mareado. En Dinamarca debe andarse con ojo porque los regalo se colocan al pie de la cama antes de que se despierte y por error puede pisar alguno (me imagino el pobre pastel…), incluso en irlanda se la empuja y el cumpleañero, volteado boca abajo, recibe tantos golpes contra el suelo como años… pobrecillos los que lleguen a los 100 años…

Con todo, la costumbre ha ido evolucionando. En las países de habla castellana era costumbre que el niño recibiera el nombre del santo del día en que nació, de donde viene la celebración de “los Santos” que en algunas partes es más importante que el propio cumpleaños. Además que se impulsó mucho en el siglo pasado pues así las mujeres evitaban comentar su edad y podían permitirse una celebración anual en su onomástica. De esta forma hemos llegado al actual cumpleaños que tanto nos gusta, incluso ese Happy Birthday tan popular que es una canción de las hermanas Mildred y Patty Hill que se canta desde el siglo XIX.

Ese día es especial y celebrarlo, a pesar del reparo que da sumar años, siempre es motivo de felicidad y es ideal para pasar con familiares y amigos, en especial si la tarta es de las que te gustan… Miren que yo siempre dudo entre la de San Marcos y la de Tiramisú, este año tocó la segunda así que me propongo disfrutarla a tope!! Yo se las recomiendo para ese día!! Ahh!! Y por cierto: Felicidades para cuando toque!!

~ Enlaces:
Las Costumbres de los Cumpleaños
Historia del Cumpleaños
Costumbres en otros países
Completo artículo sobre la Tarta de San Marcos
Maravillosas Fotos y Recetas de esta Tarta
Receta de la Tarta de Tiramisú
Otra Receta de Éxito
Tiramisú en Wikipedia
Receta de la Tarta de San Marcos para 8 personas
Elaboración e Información Nutricional
Recetas de “El Cuñao” a ritmo de chistes
La Receta que yo mismo coloqué en Wikipedia
Las mejores pastelerías de Madrid (La Mallorquina es la mejor!!Ummm)

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